Lo profetas y apóstoles del libre mercado y la nula intervención estatal tienen a sus mayores representantes en los republicanos de Estados Unidos. Ellos propugnan que el estado debe tener políticas fiscales responsables y «cortar la grasa» del aparato estatal. Pues bien, es bueno de vez en cuando hacer algunas revisiones sobre la puesta en práctica de estos conceptos, a saber:

  • En el gobierno de Ronald Reagan (1981-88) la deuda nacional pasó de 900.000 millones de dólares a 2.700.000 millones.
  • En el gobierno de Bush Padre (1989-92) la aumentó a 4.500.000 millones de dólares.
  • En el gobierno de Bill Clinton (demócarata, 1993-2000) la velocidad de endeudamiento bajó. Incluso generó excedentes que permitían proyectar que la deuda gringa se pagaría en 10 años. Terminó con una deuda de 5.800.000 millones de dólares de deuda.
  • Bush Hijo (2000-hasta ahora) batió todos los récords. En seis años aumentó la deuda a 9.000.000 millones de dólares, y aún le faltan 3 años de mandato.

¿Por qué subió tanto? Por bajar los impuestos, y entrar a un círculo vicioso de reemplazo de esos dineros por préstamos. Es decir, Bush le rebajó a los particulares y empresas millonarias el pago de tributos, y no conforme con eso, ahora les pide plata prestada.

Super buen modelo ¿eh?

Pueden ver un análisis escalofriante acá.