El tema del gas con argentina es complejo. Quisiera aportar un granito de arena al debate, desde una perspectiva que creo no se ha hablado mucho.
Primero que todo, debo aclarar que me parece bien que los argentinos suban el precio a un producto escazo escaSo. Además, pasar de 2 a 4 dolares por millón de BTU no es la gran cosa. Si tomamos en cuenta que las empresas de distribución acá en chile nos cobran más de 24 dólares por la misma cantidad, cláramente tenemos un problema que no nos afecta directamente al bolsillo.
Dejando en claro que mi postura es que las distribuidoras deberían amortizar completamente la diferencia de precio (que es risible para los montos que manejan) y no traspasarlos a los consumidores nacionales (domésticos e industriales), creo que el tema con Argentina no es de dinero. Es de confianza.
Más allá de si sube el precio o no, creo que la cosa pasa porque el gobierno argentino repetidamente nos ha dicho una cosa, y luego hecho otra. Entonces, lógicamente, hay una pérdida de confianza y una devaluación de los que significa la palabra dada por la casa rosada.
Es en ese sentido que entiendo la carta de protesta de Bachelet, pues se las a jugado para mantener las cosas calmadas en las relaciones entre ambos paises, aún cuando es atacada ferozmente por la oposición por «no hacer nada». ¿Y qué se obtiene a cambio? Que un ministro responda con insolencias.
Definitivamente estamos en una crisis de confianza. Asi que sólo queda esperar al 2008 para ser independientes energéticamente (dicho sea de paso, la política de importar energía ha sido lo más estúpido que los gobiernos de la concertación han hecho).
Update: Mish, resulta que el ex presi, Ricardo Lagos, dijo en un seminario lo mismo que escribí aca, también el día de hoy. ¿Me estará leyendo?
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