Tesis de grado.
Texto: v 1.0, octubre de 2000.
Diseño: v 2.0, noviembre 2021.
Desde el principio sabía que debía realizar un reportaje. Intuía que era la única forma de narrar, en toda su riqueza, el tema que quería investigar. Pero los requisitos metodológicos exigían definiciones, explicaciones, justificaciones del por qué usar tal o cuál género periodístico.
Así las cosas, no quedó otra alternativa que recurrir a la teoría. ¿Por qué esto debe ser un reportaje?
Según Julio Del Río, en su libro "Teoría y práctica de los géneros periodísticos informativos", el reportaje no es una noticia, sino lo que sucede alrededor de ella: "(...)es su coyuntura. Es su fundamento y por lo mismo se rige por los factores que determinan el valor de la noticia y los elementos de interés noticioso. A partir de una noticia, trasciende al suceso. Busca lo que hay detrás de la noticia (sus causas) y adelante (su proyección). Así, más que tratar un acontecimiento, estudia una situación, el hecho y su contexto [1]".
De esta forma, según este autor, el tema y el valor de un reportaje estaría determinado por los factores y elementos de interés de las noticias. En forma sucinta, éstos son [2]:
Esta definición adolece de un problema: su estrechez de miras. Al crear un esquema que reduce la temática a lo que hace noticia se ponen anteojeras a la realidad. Por ellas se pueden pasar por alto procesos que pueden revolucionar la sociedad tan sólo porque su actuar es lento, quitado de bulla, pero persistente, como la gota de agua que horada la roca.
Este es un problema tan viejo como el periodismo mismo: "La preferencia por 'la historia' (the story) que el periodismo sabe puede ser comunicada, lo conduce a desestimar los cambios que necesitan ser contados, pero que no calzan con los estándares de familiaridad, simplicidad y drama" [3].
Aquí surge un elemento importante para una definición: debe permitir la amplitud de la temática más que su restricción.
Las definiciones de reportaje son tantas como teóricos del periodismo existen, pero se pueden encontrar rasgos comunes en ellas.
Martín Vivaldi, en su libro "Géneros periodísticos", no peca de tacaño. A falta de una, entrega cuatro:
Según este autor, la única diferencia entre el reportaje y la información pura es la libertad expositiva que goza el reportero. Esto, porque "todo reportaje tiene un claro sentido informativo: se escribe para dar cuenta de algo que se juzga digno de ser divulgado y, por ende, conocido.
El reportaje cuenta un hecho importante o significativo, pero sin juzgarlo ni valorarlo. Es el lector quien debe valorar los hechos, según su personal estimativa, de acuerdo con los datos del informe [4]".
Para Ulibarri el asunto es más complejo: "Hace más de 20 años, al interrogarse sobre la condición y esencia de la novela, el escritor argentino Ernesto Sábato encontró una lapidaria y lúcida respuesta: '...es como la historia y su protagonista el hombre: un género impuro por excelencia. Resiste cualquier clasificación total y desborda toda limitación...'. Algo similar puede decirse del reportaje. En su diversidad, creatividad, profundidad, prolijidad, ritmo, ambiciones, impulsos, expresividad, amplitud, disonancias y contaminaciones, reside su grandeza; la fuerza que proyecta sobre los lectores, el efecto que produce en la sociedad y la atracción que ejerce en los periodistas. Pero también por ello desafía a quienes hacen taxonomía en esta profesión: su capacidad de cambio, regeneración, metamorfosis y evolución convierte en relativo y riesgoso todo intento por clasificarlo o definirlo con linderos precisos" [5].
No obstante esta declaración de principios, Ulibarri arriesga una definición, a mi juicio mucho más completa y compleja que las anteriormente descritas. La clave para saber lo que es un reportaje, radica en la comparación con otros géneros periodísticos. Ulibarri lo hace a través de las categorías propuestas para explicar la noticia:
Luego de buscar los elementos coincidentes en diferentes definiciones de otros teóricos, concluye que: "en el reportaje hay información, con diferentes grados de profundidad y extensión. Los medios recomendados para obtener esta información varían, pero la observación testimonial, la documentación, la investigación inspirada en métodos científicos y las entrevistas son esenciales. Su propósito puede ser informar acerca de un hecho inmediato, narrar al lector lo que acontece en lugares remotos, ampliar la noticia o revelar la trama de los vínculos existentes en un conjunto de hechos. Por otra parte, sobre la participación del periodista las recomendaciones van desde que se abstenga de emitir opiniones o se inmiscuya en el relato, hasta que lo personalice, pues por otro camino no puede alcanzar estatura literaria"[10].
En suma, diversidad es la palabra clave para designar al género. Pero una diversidad con fronteras, que permiten postular esta definición:
"Reportaje es el género periodístico que indaga con distintos grados de profundidad, valiéndose de múltiples fuentes y métodos, sobre hechos o situaciones de interés público para dar a conocer su existencia, relaciones, orígenes o perspectivas, mediante el empleo de diversas estructuras y recursos expresivos"[11].
De esta manera, y a la luz de la revisión de autores expuesta anteriormente, podríamos afirmar que en el reportaje cabe de todo. Desde el relato aséptico hasta la narración de una experiencia, siempre y cuando se respeten las dos reglas de oro:
Para Vivaldi el comentario es sinónimo de editorial. Y ésta es igual a OPINAR. Lo dice cuando recalca que "el reportero narra, expone, descubre; no opina (...) La opinión es un juicio subjetivo, [mientras que] la interpretación es (...) una valoración objetiva basada en antecedentes, análisis, concatenación y exposición comprensiva de los acontecimientos" [13].
Esto no es una prohibición para el uso de la primera persona, sino a opinar sobre lo correcto o incorrecto del (los) hecho(s), a entregar el tema digerido al lector. La idea es que el texto logre hacerle pensar, que pueda formar su propia opinión. "En el estilo directo no se explican las cosas: se muestran; no se razona con opiniones: se hace razonar con hechos. Se dice cómo son las cosas según las ve el escritor"[14].
Un elemento muy importante del reportaje, según Vivaldi, es la variedad. "Nos da descripciones, diálogos, anécdotas, rasgos de humor, ocasiones para reflexiones filosóficas, etc. (...) Se deben ver las cosas, se debe oír a las personas; se debe ver y oír todo lo que sea visible y audible"[15].
Según esto, los elementos para realizar un reportaje, considerando lo expuesto por Vivaldi son:
Es importante notar que este último aspecto requiere la utilización de los siguientes considerandos:
Por su parte, Ulibarri también entrega su receta de ocho pasos[16]:
De esta manera, tomando en cuenta lo expuesto anteriormente, puedo resumir que el reportaje es la opción lógica para esta investigación. Es el único género que permite expresar la riqueza del tema a investigar, al tiempo que justifica la elección de un tema que, si bien no es noticioso, sí puede mostrar una evolución de la sociedad.
Son las dos de la tarde y la oficina está casi vacía. No es pequeña, pero ocho personas pueden convertirla en un caos. Pero a esta hora sólo hay dos personas sentadas frente a sus computadores haciendo trabajo de rutina: revisar El Sitio, arreglar fallas, contestar correo. A las cuatro de la tarde el panorama no ha variado demasiado, excepto que han llegado dos personas más: los actualizadores. Se encienden otros dos computadores y van a buscar la pauta al tercer piso. A las cinco de la tarde comienza a moverse el ambiente. Los primeros despachos han salido de la redacción y los actualizadores han seguido su trayectoria a través de la red. Los transforman de plataforma (la redacción utiliza macintosh y ellos, windows) y comienzan a armar las páginas de triunfo en Internet una a una. Este proceso continuará hasta que hayan despachado todo el suplemento diario, lo que pude tomar entre 5 y 8 horas.
En el sexto piso del World Trade Center, el trabajo es distinto. A las 10 de la mañana se arma la pauta noticiosa del día y se da inicio a la producción de el sitio, canal local de una transnacional que opera en Argentina, Brasil, Colombia, Chile, Uruguay, España, Estados Unidos, y México. Diecisiete personas trabajan en un departamento completamente cableado, con pisos falsos y estaciones de trabajo abiertas. De ellas, sólo cuatro son periodistas. El resto, personal administrativo y de apoyo. Todos los días producen material propio y lo publican con una combinación de trabajo a mano (se arma el código html de cada página) y automatización (plantillas).
A un par de edificios de distancia, en el segundo piso de Vitacura 2736, el panorama es similar. Una gran oficina cobija al equipo generador de contenidos del portal terra, filial chilena de la española terra, ex filial de telefónica. Son 25 personas encargadas de mantener El Sitio en funcionamiento. Nueve de ellos son periodistas. El resto, diseñadores, ingenieros y product managers. Pero la fuerza de trabajo aumenta, pues existen más de 25 periodistas freelancers. A las 8 de la mañana comienza el ajetreo. Cada periodista se concentra en cubrir su canal de noticias, pero los más ocupados son los de "actualidad". Sus fuentes: diario La Tercera y las agencias noticiosas. Nada les molesta, pues la oficina es tan grande y aséptica como cualquier empresa estadounidense. Para los demás servicios que ofrece el portal están las setenta y cinco personas restantes, que se encuentran repartidas en el mismo edificio.
Entre tanto en Vicuña Mackenna 1962, sobre la redacción del diario la tercera, los encargados de mantener las noticias en el aire llegan temprano. A las siete y media están en sus puestos escuchando la radio, viendo los noticieros por tv y vigilando las noticias que llegan por agencia. Se trabaja mano a mano con los editores de la versión papel, con la misma pauta noticiosa. Son seis los periodistas que actualizan y transforman la edición de papel a digital. En la gran oficina que ocupan hay veinticinco personas, entre vendedores, diseñadores y otros periodistas a cargo de los demás productos de "Medios digitales de Copesa": Revista Icarito, Revista Mouse, Revista Qué Pasa, Revista de Mujer a Mujer, Suplemento Tiempo Libre, Suplemento Papas Fritas, Sitio especial siglo xx, y los diarios la hora y la cuarta, además de los especiales informativos.
El panorama es más relajado pero más ruidoso en la oficina 501 de El Bosque Norte 0440. Allí se escucha de fondo la televisión y la radio desde las seis y media de la mañana hasta las dos de la mañana. En cuarenta metros cuadrados trabajan 9 personas dedicadas a mantener El Sitio de Areanoticias. Con un promedio de 26 años de edad, el ambiente es relajado... exceptuando el hecho de estar pendiente de las agencias, los noticiarios y los boletines. Algo contribuye a calmar los ánimos la vista al cerro San Cristóbal y la Avenida El Bosque.
¿Cuál de todos estos casos es un medio de comunicación digital? ¿todos? ¿ninguno?
Definir lo que es un medio de comunicación ya no es como antes. Desde principios del siglo hasta fines de los '80, los investigadores sabían exactamente de qué hablaban cuando mencionaban el término. El esquema básico de la comunicación era:
Emisor | -> | Mensaje | -> | Medio | -> | Receptor | -> | Efectos |
1 | 2 | 3 | 4 | 5 |
Complejidades más, complejidades menos, el modelo siempre se mantuvo parecido, aún cuando lo estudiaron escuelas de pensamiento distintas. Invariablemente el lugar de los medios de comunicación se encontraba en el punto nº 3: el soporte sobre el cual se envía el mensaje al receptor. Pero ¿qué distingue a la radio, por ejemplo, del teléfono? Ambos son medios de comunicación, pues permiten enviar mensajes a ciertos receptores.
La respuesta es la masividad de uno versus la especificidad del otro. Cuando hablamos de "medios de comunicación", nos estamos refiriendo a "medios de comunicación de masas". Éstos tienen ciertas características que les son únicas[18]:
Con la llegada de la era digital, y con la World Wide Web para ser más específicos, la clasificación comienza a temblar. El motivo es la modificación de dos de sus componentes: la verticalidad del flujo y el alcance masivo. La primera, porque deja de ser unidireccional al permitir la interacción del usuario; la segunda, porque la audiencia ya no es anónima ni heterogénea, ni importa la dispersión. Los denominados receptores pueden escoger entre una gran variedad de productos informativos, lo que conlleva una atomización de audiencias.
Tomando en cuenta estos cambios, se puede aventurar una definición del medio digital:
Un medio que procesa y transmite mensajes en forma bidireccional a una audiencia dispersa pero específica, realizado por profesionales que siguen una pauta normativa y cuyos contenidos son perecibles.
Gran parte de lo nuevo que tienen los medios digitales radica en lo que sus "receptores" pueden hacer. Incluso cambia la forma de denominarlos. Ya no son lectores/televidentes/radioescuchas, sino Usuarios.
Este cambio de palabras es más que un adorno cosmético. Grafíca la profunda transformación de los roles. Todas las denominaciones actuales muestran a un destinatario pasivo que sólo puede consumir lo que los medios le entregan:
En cambio la palabra para definir al público de los medios digitales denota acción:
Según Luis Fernández[20], director de en.red.ando, esto ha sido causado por un cambio en la forma de poseer la información.
"Por una parte, la información ha cambiado de naturaleza. (...) La relación entre el poseedor de la información y el resto de la sociedad que cuajó tras la segunda guerra mundial, entre el emisor y el receptor, el primero jugando un papel activo y determinante y el segundo uno pasivo, comenzó a volar por los aires cuando las tecnologías de la información inyectaron un rasgo nuevo y subversivo: la interactividad. La frontera entre los detentadores del poder informativo y lo que podríamos llamar en sentido amplio como la 'audiencia' se volvió de repente difusa, ambigua, compleja".
Además, cambió el valor de la información. Antes estaba basado en el criterio de la exclusión (más valiosa mientras menos la poseyeran). Sin embargo, en un mundo integrado por las tecnologías de la información, el valor se desplaza hacia la capacidad cooperativa de los agentes sociales.
"El ámbito digital ha convertido a la información en una mercancía crucial en las nuevas relaciones internacionales en un mundo rápidamente cambiante. Poseerla en exclusiva se vuelve una tarea cada vez más espinosa, costosa, insostenible y, a la postre, estéril. La sociedad de la información reclama una participación que dinamita tales intentos exclusivistas, por más que durante bastante tiempo éstos perdurarán con éxito pues todavía subsisten poderosas estructuras heredadas de la guerra fría"[21].>
Así, la gran revolución que ha traído la red no es la posibilidad de acceder a múltiples fuentes de información repartidas por todo el planeta, sino la posibilidad de interactuar con ellas y emitir información.
Aquí es donde se crea la fractura entre los medios de comunicación que Quim Gil[22], llama "en" Red y los medios de comunicación "en la" Red:
"O sea, entre la comunicación realmente interactiva y la comunicación de masas de nueva generación, que mantendría unas barreras tecnológicas, legales o factuales entre emisores y receptores. El ejemplo más claro de esta opción hoy en día lo configuran los canales televisivos digitales por vía satélite. La Internet II y las redes privadas son infraestructuras de red que favorecen el mantenimiento de esta distinción".
La herramienta básica de interacción es el e-mail. El director de en.red.ando no puede ocultar su sorpresa: "En los 30 años de periodismo que llevo en las espalda, nunca había tenido una relación tan viva y directa con los lectores"[23].
Esta exclamación, hecha el 31 de diciembre de 1997, se quedó corta. La relación es tan potente que puede cambiar la relación emisor/receptor. Esto, porque el usuario es una fuente potencial para el periodista. Es el caso de la matanza de Waco, en Estados Unidos, donde la prensa dio una versión basada en la información oficial entregada por el FBI. Otra, bien distinta, comunicó un venezolano que participa en Atarraya (atarraya@mit.edu), una lista venezolana de correo electrónico. Casualmente vivía frente a Waco, vio y narró todo. Esto demuestra que un medio digital al informar de algo corre el riesgo de que cualquier testigo o experto puede responder para ratificar, rectificar, desmentir, ampliar y comentar.
En palabras de Roberto Hernández Montoya[24]: "Cuando escribo mis artículos en papel la gente me los comenta, pero tengo que topármela en la calle y no sé si me leyeron de verdad o solo quisieron ser amables conmigo. Tienen que conocerme, además. Los demás me pasan al lado y no saben que fui yo el que escribió eso que les disgustó, gustó o les fue indiferente. El feedback a través del papel es pastoso, espeso, lento. Por Internet, en cambio, tengo la certeza inmediata de que lo que escribí tuvo un efecto porque la gente me habla a través de www.analitica.com/bitblioteca/roberto/, donde se entera de otras cosas que he escrito, y me dice lo que piensa, me corrige, me aplaude, me refuta. Me informa, en fin. El informador es informado por su informado.
Así se borran las fronteras entre informadores e informados. El derecho a réplica no será ya concesión graciosa o intromisión legal, sino realidad cotidiana y natural al medio. Todo lector podrá ser su propio ombudsman [25], porque todo el mundo podrá ser informador. La comunicación será horizontal porque estar informado equivaldrá a informar".
La técnica que faculta a los usuarios a responder a los emisores, también permite que se comuniquen entre sí. Cuando esto sucede nace la comunidad digital: un conjunto de usuarios que interactúan en un determinado lugar de Internet y que se han reunido porque tienen intereses en común.
El sociólogo Axel Callespan [26] piensa que esto se produce por la disociación socio-espacial que crea la red:
"Yo no necesito vivir en un barrio de negros para estar a favor de ellos. Puedo estar en Ñuñoa y adscribir a todas las ONG del mundo que están en contra de la xenofobia y puedo participar en un grupo de discusión con gente de todas partes del mundo que está en el mismo tema... en tiempo real. Antes yo me relacionaba y tenía que encontrar mis afinidades dentro de un espacio: mi colegio, mi familia, mi barrio. Ahora no. Se busca la afinidad antes que el espacio, y puedo determinar mi conducta a partir de mis preferencias que voy descubriendo dentro de la red. Por lo tanto puedo tener una personalidad según cuál es mi preferencia en ese momento, puedo ir tomando decisiones y participar. Esto sucede porque, entre otras cosas, la sociedad en sí ha sido incapaz de mantener ciertos elementos de la sociedad tradicional, como el 'cara a cara'".
En efecto. En la sociedad tradicional el espacio público era tangible: la plaza, el ágora, el foro público. Las personas podían interactuar directamente, dar a conocer su opinión. En la sociedad moderna, en cambio, el espacio público es intangible, está en el aire: los partidos políticos, los medios de comunicación. "Y ¿qué pasó con mi 'cara a cara'?", pregunta Calles. "No lo tengo. Entonces Internet me hace recuperar el derecho que tengo de relacionarme cara a cara con la gente, aunque nunca nos veamos las caras. Es como una vuelta al pasado desde el futuro".
Los sitios utilizan diferentes formas para formar comunidades. Todo depende de la capacidad técnica que tenga cada uno. Las más comunes son:
Como se puede apreciar, el sistema de envío de noticias, por sí solo, no es interactivo. El segundo sí lo es.
Se pueden crear otras formas de invitar al usuario a interactuar, dependiendo de la creatividad de los desarrolladores de cada sitio. Por ejemplo, en la revista electrónica triunfo existe una sección llamada "La columna del lector". Allí se publican columnas de opinión que envían los usuarios a través del correo electrónico. Este sistema nació de una necesidad, ya que no tienen la plataforma tecnológica para realizar algo más complejo.
Areanoticias lo hizo con su concurso "El gran e-mail" y su sección "Confidencial". En ambos se alienta a los usuarios a participar por e-mail. En el primero, escribiendo uno que sea divertido u original. En el segundo, que entregue alguna información que no haya salido en otros medios.
El Sitio se inclina por la entretención y mantiene distintos test de conocimientos, aún cuando no tienen una periodicidad fija.
Al darle la posibilidad al usuario de emitir sus opiniones, y que éstas sean publicadas en el medio digital, comienza a "crear contenido". Esto no es otra cosa que la socialización de las opiniones, compartir las experiencias y las informaciones. Los contenidos así generados pueden llegar a ser noticia por sí mismos.
Un caso extremo es el affaire Clinton/Lewinski, que explotó a raíz de la publicación de la noticia en Internet. Luego se colgó de ella el Washington Post y los demás medios de comunicación. En el ámbito doméstico, para saber cuál es el clima político entre los ciudadanos de a pie, es bueno entrar al newgroups chile.soc.politica. Allí se discuten los temas de política coyuntural desde la óptica de lo que podemos llamar la "opinión pública" .
Existen otras formas de estimular al usuario a participar, pero todas ellas dependen de la política que al respecto haya establecido el medio. Esto, porque jugársela por hacer protagonista al usuario es caro. Se necesita personal dedicado a ello, pero más importante, todos los que trabajan en el medio deben estar dispuestos a ser corregidos, a cambiar informaciones y a actuar como si el usuario fuera un compañero más de la redacción.
Quim Gil lo grafica en su clasificación de medios digitales[27]:
Un medio digital ideal debe borrar la frontera del emisor/receptor, permitiendo que el usuario se nutra de lo entregado por el periodista, pero que también este último pueda enriquecer la información gracias a las colaboraciones, correcciones, aclaraciones y opiniones de quienes lo visitan.
Esto demanda, claramente, aprender nuevas técnicas, usar mejor las tecnologías existentes y tener una cultura de aprendizaje para adelantarse a lo que viene. Pero por sobre todo, se necesita una nueva mentalidad.
Con esta declaración Quim Gil plantea la problemática del "ser periodista".
¿Qué define al periodista? Ya no es "comunicar", pues cualquiera que tenga acceso a Internet tiene esa capacidad. Tampoco lo diferencia la calidad de la información, pues "un periodista malo no deja de ser un periodista y en cambio existen personas con conocimientos específicos que pueden informar muy bien, sin ser periodistas".
El hecho de recibir honorarios tampoco es diferenciador, pues en la actualidad hay muchas profesiones que se basan en la creación y gestión de información. Pocas tienen que ver con el periodismo: content managers, infonomistas, relacionadores públicos, ingenieros de la información... y seguirán creándose más[28].
Así, quizás lo único que lo diferencia del resto de profesiones ligadas a las comunicaciones es su responsabilidad social. Esta responsabilidad se basa en la libertad de información formulada en las democracias liberales, la independencia del informador y el derecho de la ciudadanía a recibir informaciones plurales y veraces. Y esto es válido tanto para el periodismo tradicional como para el digital[29].
¿Qué distingue a un periodista a secas de uno digital? Hay quienes alegan que ser "digital" es tan tirado de los pelos como ser "radial" o "televisivo".
"Creo que no hay diferencias con los periodistas que trabajan en Internet", dice Alejandro Osorio, periodista del diario La Tercera. "Ellos usan las mismas técnicas que nosotros y actúan de la misma forma. Lo único diferente es que usan computadores conectados a la red, y eso es simplemente una tecnología que se aprende y listo. Igual que si fueras a trabajar a la radio o a la televisión".
Pareciera que cada vez que hay una nueva tecnología quienes las usan buscan diferenciarse del resto. ¿Ocurre esto con los periodistas autodenominados "digitales"?
Según Quim Gil, no. "Antes de llamarse a sí mismos 'digitales', existió el concepto de 'periodismo electrónico'. A él se asocian medios electrónicos ya clásicos como el teletexto o el diario por fax. Pero electrónico no es equivalente a digital. Medios como la televisión pueden considerarse electrónicos aunque mantengan su condición analógica. Por otra parte, se está consolidando el término inglés 'online journalism', sobretodo gracias al empuje de los periodistas en línea norteamericanos. Pero el nuevo periodismo no se distingue por la electrónica ni por estar 'en línea'. El ejemplo más claro son los medios que han trasladado lo que ofrecen en papel (o tv o radio) a la www, sin que ello implicase la mínima variación en las rutinas periodísticas de la redacción".
Quizás Gil se refiere en esta última idea a visiones más centradas en la técnica y la inmediatez como la que tiene Marcelo Saavedra, editor de deportes de áreanoticias: "existe una diferencia clara con los medios que no están en Internet. De partida, no hay hora de cierre. Es mucho más rápido el cuento, lo que ayuda a corregir errores de inmediato, si es que los hay. Además si uno tiene la noticia de último momento, puede subirle un párrafo y luego ir ampliándola a medida que ocurra".
Pero el nuevo periodismo al que hace referencia Gil es mucho más. El periodismo "digital" tiene su fuerza en la redefinición de la relación emisor/receptor: "el periodista digital rompe con la comunicación lineal y unidireccional de un emisor a un receptor. Está inmerso en un mar de información y está interconectado a fuentes, periodistas, receptores, interactores, etc. Una buena parte de sus rutinas periodísticas no son coincidentes a las de los periodistas convencionales. Ni siquiera a las de los periodistas convencionales que trabajan y publican en un soporte digital. Es previsible que todo periodista acabe procesando la información con herramientas digitales -computadores, cámaras, etc- y publicando en medios digitales -Internet, televisión digital, etc-. Por tanto es previsible que todos los periodistas acaben siendo 'digitales' de la misma forma que todos han acabado siendo 'telefónicos' o 'fáxicos'. Pero unos podrán trabajar siguiendo unas rutinas periodísticas clásicas adaptadas y evolucionadas hacia el medio digital. Otros, los más avanzados, estarán creando y consolidando unas nuevas rutinas propias de un proceso de comunicación multimedia, multilineal e interactivo".
En esta línea se entiende la afirmación de Karma Peiró[30]: "En el mercado ya tenemos un sinfín de nuevos medios en que cada uno requiere una manera distinta de proceder. De ahí que cueste tanto definir qué significa ser periodista digital. Un periodista que está trabajando en la edición electrónica de un medio tradicional no hace lo mismo que yo, que me dedico a la coordinación de contenidos y a escribir en una revista electrónica que reflexiona y analiza, a través de artículos de opinión, lo que está ocurriendo dentro de la Red. Ni que contarte de la labor de moderación y coordinación que desempeño en en.medio@ donde se parte de una filosofía hecha desde en.red.ando a medida, a partir de la interacción de los participantes de esta lista[31]".
"La era digital nos va a pedir mucho más", afirma Peiró. "Jugaremos un rol muy importante en el terreno de la comunicación (y no me refiero exclusivamente al hecho de editar o transmitir diariamente unas noticias a una audiencia anónima, que es lo que ha ocurrido hasta ahora en todos los medios tradicionales dentro y fuera de la Red), sino creando redes para que se produzca un flujo continuo de información entre el medio y los lectores aprovechando al máximo la interactividad que Internet concede y que todavía no se ha sabido explotar"[32].
"Yo necesito que la gente que trabaja conmigo tenga rapidez mental y capacidad de resolución rápida. Porque las noticias surgen de pronto y el editor no puede estar todo el día encima de ellos. Deben ser capaces de tomar la decisión de publicar y hacerlo", dice Marcelo Saavedra.
Ese es el centro de lo que debe ser un profesional de la comunicación en Internet: veloz, alerta, con capacidad de gestión y de decisión. Debe estar dispuesto a trabajar en equipos multidisciplinarios, y al mismo tiempo estar preparado para levantar un sitio por sí solo.
"Debe estar en permanente actualización, porque el medio cambia en forma muy rápida", afirma Marcelo Silva, editor de deportes y colaborador de actualidad en El sitio. Por lo mismo necesita una mente abierta para relacionar las tendencias actuales y proyectar las necesidades del usuario del futuro... un futuro que tocará a su puerta en menos de seis meses.
Por ello cobra fuerza la idea del cartógrafo enarbolada por Luis Fernández Hermana. En un medio en que las carreteras y autopistas están por construir, y que posiblemente nunca llegarán a estar establecidas, el periodista deberá salir del asfalto y adentrarse en campos, bosques, montañas, lagos y desiertos de información, ofreciendo un riguroso mapa comunicativo a su entorno.
Más que un periodista, un gestor de información y de conocimientos. Más que un transmisor de contenidos, un coordinador de interacciones.
La mejor manera de saber qué es un periodista digital es observar lo que hace. Quim Gil propone unos cuantos puntos sobre el tema en sus apuntes para la cátedra de Periodismo Digital en la Universitat Oberta de Catalunya. Al completar esta observación con la comparación de las rutinas del periodismo tradicional, se puede obtener la siguiente síntesis:
Rutinas con respecto a las fuentes |
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Periodismo "análogo" |
Periodismo "digital" |
El periodismo clásico parte de la base de que la información es un bien escaso que hay que buscar. |
El periodista digital entiende que la saturación de información le obliga a filtrar la información. Su trabajo es encontrar lo valioso en los mares de datos. |
Trabaja con frentes noticiosos establecidos (los ministerios, colegios profesionales, tribunales, etc). |
El periodista digital busca nuevas fuentes, pero a la vez debe comprobar que sean en realidad quienes dicen ser. Su selección de fuentes será una garantía para su clientela. |
El periodista tradicional se guarda las fuentes para sí mismo. Las utiliza, pero no puede ponerlas a disposición del público. |
El periodista digital debe ofrecer a su clientela el acceso a todas las fuentes originales que muestren públicamente sus contenidos, dándoles pie a que amplíen la información si lo desean. No hay limitaciones de tiempo ni espacio que nos lo impidan. |
El valor de la fuente es incuestionable, pues sólo el periodista puede acceder a ella. |
Como las fuentes son accesibles por cualquiera y además son muchas, la jerarquización de ellas es lo que destaca al periodista digital. Por ejemplo: en una información sobre el ascenso de la ultraderecha en Europa es recomendable una lista completa de enlaces hacia páginas de ultraderecha. Pero es el orden de los enlaces y los comentarios del periodista a cada uno de ellos lo que da al lector las claves de contextualización de esta información. |
Se trabaja según la pauta creada por el periodista, editor y/o director. En cualquier caso, no la del receptor. |
Al existir la posibilidad de personalización de los contenidos, el periodista digital realiza consultas a las fuentes a petición de los lectores / usuarios. |
Se trabaja con base a una pauta que se sigue a rajatabla. Sólo cambia si el hecho noticioso es muy importante. |
La pauta es menos rígida. Sólo se reseñan temas importantes y el resto dependerá de lo que suceda en el día. |
Rutinas con respecto a los destinatarios de la información |
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Periodismo "análogo" |
Periodismo "digital" |
Trabaja para un formato específico: texto, sonido o imágenes |
Debe trabajar la información de tal forma que pueda ser publicada en cualquier formato: sonido, texto, o imágenes. |
Produce contenidos genéricos, dirigidos a su "público objetivo" que en realidad no conoce. |
Produce contenidos genéricos y también específicos para un público que es identificado tanto por medio de la tecnología, como por las peticiones que realiza directamente al medio |
Está sujeto a limitaciones técnicas específicas. Una vez aprendidas, se repite un modelo. |
Está sujeto a limitaciones técnicas múltiples, pues debe lidiar con distintos browsers, sistemas operativos, etc. Por ello debe producir pensando que el contenido podrá ser presentado de distintas formas. |
Una vez aprendidas las técnicas, se repite el modelo establecido. |
Debe adaptarse a los cambios que se hagan en el sitio. Debe estar preparado para adaptarse a nuevas exigencias y nuevos criterios técnicos. |
El periodista que administre los recursos de interacción, actuará como inspirador y animador de la inteligencia colectiva de la comunidad digital. Su habilidad consistirá no sólo en tomar la iniciativa en el proceso de información, sino en saber canalizar todo el conocimiento que se genere en el seno del grupo. |
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Se dedica a identificar fuentes, a extraer información, procesar contenidos y publicarlos. Pero también destina una buena parte de sus energías interactuando con sus "lectores". Por lo tanto, en su economía de esfuerzos debe conseguir que los usuarios que más trabajo le den sean los que más compensaciones le aporten, ya sea pagando con dinero, con información, con criterio o simplemente con satisfacción emocional. |
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En cambio, debe procurar que sus lectores pasivos y desconocidos no le generen gastos. Ya que de ellos no obtiene directamente ni dinero, ni información, ni criterio, ni satisfacción emocional. |
Rutinas con respecto al medio |
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Periodismo "análogo" |
Periodismo "digital" |
Se trabaja pensando en un solo soporte. La producción del contenido se realiza en cadena, de forma compartimentada. |
Debe trabajar desde una perspectiva multimedia, atendiendo a elementos como el diseño de la interfaz y de la estructura de contenidos, así como la integración de textos, imágenes, sonido, bases de datos, programas, etc. En la práctica esto conlleva un trabajo en equipo y en red mucho más integrado. |
Tiene horario de cierre y tiempo extra para dejar en "reposo" una noticia antes de ser publicada. |
La Red es un medio de publicación instantánea. En teoría, se publica según ocurra el hecho noticioso. |
Su identidad no es puesta en duda. |
No sólo será necesario que el periodista digital certifique las fuentes, sino que también acabará resultando necesario que certifique su propia identidad hacia su clientela. |
La Red tienen una componente de caos continuo, sin final previsto por el momento. El periodista digital integra a sus servicios la capacidad de gestionar este caos y de ofrecer sus criterios de ordenación a personas que lo necesiten. |
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El medio es lineal. Por lo tanto se entrega información estandarizada. |
La Red es hipertextual, multilineal. El periodista deberá sacar provecho de estas estructuras de información para ofrecer unos contenidos personalizables, flexibles, ampliables, actualizables, interactivos. |
Su capacidad de contextualizar la información está limitada al espacio o al tiempo del soporte que utiliza. |
El hipertexto y el almacenamiento digital de la información permite un rápido acceso a contenidos antiguos. Así es posible contextualizar información, ofrecer backgrounds, utilizar archivos y hacer público el acceso a bases de datos en estado puro. Esta es la vertiente documentalista del periodista digital, que no sólo ofrece un pez en forma de información de archivo, sino que enseña a su clientela cómo pescar en las bases de datos. |
Los contenidos son locales, por lo que la barrera lingüística no es problema. |
la Red es mundial, lo que implica que las posibles audiencias son multiculturales y multilingües. Cada medio digital opta por trabajar sobre una audiencia determinada, y sería una lástima que un buen periodista digital trabajara bien todos los puntos anteriores pero viera limitada su posible clientela por una simple barrera lingüística. Algunas temáticas estarán bastante limitadas a un público monolingüe. Otras no. |
Rutinas con respecto los contenidos |
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Periodismo "análogo" |
Periodismo "digital" |
El editor de área y el editor general decide qué se publicará. |
Muchas veces, por la premura, es el periodista quien decide qué y cómo se publicará. |
El flujo informativo de la radio y la televisión, que es substitutivo de las informaciones previas. Así, el periodista no debe preocuparse de lo publicado o emitido anteriormente. |
El flujo informativo de un medio digital es acumulativo, por lo que debe preocuparse que las noticias antiguas no se repitan con las actuales. Una opción es ampliar las noticias viejas con las informaciones nuevas. |
Se vive en un eterno "ahora", y los contenidos lo reflejan. |
La vigencia de los contenidos están explícitamente relacionados con su fecha (y hora) de emisión. |
El diseño de las informaciones digitales tiende a formatos abiertos, en los que sea posible modificar y ampliar la información. Es tarea del periodista digital organizar la convergencia de información, opinión, feedback, interpretación, contextualización y valoración transversal. Pero es necesario disponer de algún sistema de base de datos, puesto que las capacidades del trabajo artesanal tienen un límite. |
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En muchos casos la información deberá ser diseñada en base a diversas capas de profundidad. Por ejemplo, disponiendo de una primera capa actualizada pero superficial y de posteriores capas con análisis más profundos. |
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La actualidad es el valor máximo |
En la Red la actualidad pierde valor específico frente a la profundización, contextualización e interpretación de ella. |
Así las cosas, el perfil del periodista se basa en seis ideas:
- Mantenerse a flote en un mar de datos.
- Manejo de ciertas destrezas técnicas variables.
- Creciente interdependencia y, paradójicamente, independencia.
- Pensamiento no lineal, capacidad de contextualización.
- Capacitado para diseñar flujos de información.
- Actitud abierta al usuario.
Esto se traduce en un conjunto de recomendaciones o reglas que pueden servir de guía para hacer un catastro de las técnicas y conocimientos que necesitan los periodistas que trabajan en la red:
Y no hay que olvidar que estas recomendaciones se suman a los amplios requerimientos que se piden a los periodistas. El manejo de las fuentes, la rigurosidad, el apego a un marco ético y demás materias enseñadas en las universidades, además de aquellas aprendidas en el fragor de las redacciones, siguen teniendo tanta o más validez.
Como se puede apreciar, las habilidades necesarias para trabajar en un medio digital son muchas. El problema radica en que muchos creen que el meollo es la técnica. Quienes piensan de esta forma están condenados a quedar a la zaga, a que la cotidianeidad del medio los supere, porque el avance tecnológico es muy rápido. Los equipos quedan obsoletos en promedio después de 12 meses, y los softwares, cada 6.
Y a veces más rápido.
Por ejemplo en La Nación se compró el editor de HTML de Macromedia, Dreamweaver 2.0 en diciembre de 1999. En marzo de 2000 ya había salido la versión 3. Y en junio salió a la venta la versión mejorada de Ultradev, mezcla de Dreamweaver 3 con Drumbeat 2000, programa para la integración a bases de datos.
Por lo tanto, más que enseñar una tecnología específica, es necesario que en las escuelas de periodismo se prepare a los estudiantes en las mecánicas de los programas, y cómo enfrentarlos. En suma, enseñar a aprender.
Este desplazamiento de las herramientas técnicas a las capacidades mentales marca la gran diferencia. Se deben asumir nuevas funciones y estar abiertos al cambio de mentalidad que exige el estar permanentemente expuesto al cambio y a la corrección de los usuarios. Es por eso que la digitalización de los medios convencionales no convierte automáticamente a los periodistas habituados a las rutinas tradicionales en periodistas digitales. Y tampoco es necesario que todos los periodistas cambien sus formas de trabajo. "Muchas rutinas y perfiles periodísticos tradicionales continúan en plena vigencia y pueden ponerse al día y evolucionar dentro de unos parámetros de periodismo unidireccional, lineal y de masas"[36].
La Red permite la creación de medios digitales formados por una micro-redacción, integrada incluso por una sola persona. Pero difícilmente una sola persona podrá cubrir todas las habilidades y tareas a realizar. Por ello los equipos periodísticos reducidos deberán incorporar el sistema de red en su propia organización profesional y empresarial, buscando alianzas externas, subcontratando tareas, etc.
Estén dentro o fuera de su estructura empresarial, el periodista digital deberá moverse como pez en el agua en sus relaciones con profesionales vecinos. "No hablamos ya de superar las tradicionales tensiones entre redactores, fotógrafos y publicistas, sino en ser capaces de establecer un lenguaje de trabajo común con documentalistas, diseñadores, programadores, administradores de sistemas, comerciales, etc. No se puede establecer un lenguaje de trabajo óptimo con otros profesionales sin conocer los parámetros básicos de sus respectivos trabajos, por lo que el periodista digital debe incorporar a su formación introducciones a disciplinas vecinas muy diversas"[37].
En los nuevos medios se confía mucho en la capacidad de gestión y en las decisiones que toman los periodistas que trabajan en ellos. Pero hay que estar alerta a las intuiciones respecto al trabajo digital que se fosilizan y convierten en verdades absolutas y axiomáticas, sin que los profesionales hagan el menor esfuerzo de comprobarlas. Una, por ejemplo, es la extensión de las notas. Consultado sobre el tema, Marcelo Saavedra respondió:
"-La premura puede ser una livianización del periodismo, pero la hace más sencilla al visitante. Ya no cabe alargar el texto. Si escribes muy largo la gente se aburre. Si hay más de un pantallazo[38] la gente se aburre y se va.
-¿Ustedes tienen estudios de eso?
- No sé si hay. Son más impresiones, por lo que sentimos nosotros, nuestras conversaciones con la gente. Además que nosotros hemos escrito siempre notas cortas".
Un análisis de los contenidos entregados por la radio versus las noticias "duras" de los medios en Internet muestra que no hay gran diferencia. En un mundo en que las noticias que responden a las seis w's (What, who, when, how, where, why, o qué, quién, cuándo, cómo , dónde y por qué) son cada vez más comunes e incluso saturadoras (se repiten una y otra vez), el análisis y la relación de elementos tendrá cada vez más valor.
"La gente pide cada vez más información en tiempo real, pero al mismo tiempo tiene cada vez menos conocimiento de lo que se produce a partir de esa información", reflexiona Axel Calles. "Ves las noticias pequeñas desde que te reparten el diario en el metro, gratis. Y las lees todas entre la estación Tobalaba y la Chile... eso es para las personas que no saben lo que está pasando; pero si el consumidor quiere tener opinión va a tener que leer análisis de alguna otra forma. Eso se une a que cada vez más la política y los medios de comunicación van a tener que generar opinión, porque en unos pocos años las elecciones y plebiscitos van a ser por la red, y la persona que quiera participar en la comunidad y tenga que ir a votar, primero debe tener una opinión".
Y los llamados a organizar esta nueva ágora, a dar las oportunidades de intercambio de opiniones, y en suma a contribuir a crear al nuevo ciudadano, son los periodistas.
Los digitales.
A lo largo de esta investigación he buscado reconocer las diferencias entre el periodista "digital" y el periodista "análogo" o "tradicional". Así, luego de revisar qué son los medios digitales y cuáles son sus rutinas y técnicas; y tras compararlos con las rutinas periodísticas tradicionales, puedo concluir que existe una diferencia. Ella es el cambio de mentalidad que se necesita en tres aspectos:
En respuesta a los objetivos específicos he concluido que los profesionales de las comunicaciones que decidan ingresar a trabajar en los medios on-line, deben tener una preparación extra. Por ello propongo que se incorporen las siguiente materias en los planes de estudio de los licenciados en comunicación social:
Respecto al impacto que suponen las nuevas formas de producción periodística on-line, es importante destacar que los periodistas que trabajan en estos medios no saben qué son, y por ello se buscan. Aún cuando la naturaleza de sus funciones son distintas, están teorizando, buscando gente que hable de los mismos temas, buscando una identidad.
La naturaleza del trabajo, la cantidad de cosas que se deben aprender y manejar, y la premura en publicar, provocan una permanente sensación de ser sobrepasados por el medio.
Por otra parte, los colegas "análogos" no los entienden, pues creen que las rutinas son las mismas. No toman en cuenta que las responsabilidades son mayores, pues muchas veces el periodista es su propio editor, y por lo tanto, debe hacerse responsable de lo que publica en forma directa. Ello redunda en un mayor cuidado con las informaciones, pero también una mayor libertad.
Finalmente surge la pregunta: ¿reemplazarán los digitales a los análogos? No. La gran mayoría de los tradicionales continuarán tal y como hasta ahora. Posiblemente en mayor número que antes, pues la penetración de la red aún no es tan masiva como su competencia: radio, televisión y prensa. Incluso tendrán cabida en los medios digitales haciendo las mismas labores que realizaban en los análogos, sólo cambiando de plataforma tecnológica.
Pero un pequeño grupo tomará cada día más fuerza. Un núcleo de periodistas que harán cosas radicalmente distintas a sus colegas análogos. No trabajarán ni reportearán igual, pues muchas veces no sabrán si son diseñadores, ingenieros, agentes de ventas o periodistas. Porque estarán organizando los flujos de la información, creando nuevos canales, ideando formas de presentar la información, haciendo de puente entre los usuarios y los reporteros, administrando los recursos del sitio, buscando publicidad o formas de financiamiento. Estarán sopesando y previendo tendencias, adelantándose a ellas e implementándolas. Estimularán el intercambio entre usuarios, dándole vida a las comunidades virtuales.
Ellos serán los cerebros tras los sitios en Internet. Definirán cómo deben hacerse las cosas, crearán los paradigmas de funcionamiento y trabajo.
Los demás simplemente seguirán sus huellas.
Libros |
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Armazañas Emy, Díaz Javier y Koldo Meso |
"El periodismo electrónico". Editorial Ariel S.A., Barcelona, 1996. |
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Del Río Reynaga, Julio. |
"Teoría y práctica de los géneros periodísticos informativos", editorial Diana, México, 1991. |
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Garretón Manuel y Orlando Mella (editores) |
"Dimensiones actuales de la sociología". Sociedad chilena de sociología, Santiago de Chile, 1995. |
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Gubern, Román |
"El eros electrónico". Grupo Santillana de Ediciones S.A., Madrid, 2000. |
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Taylor y Bodgan |
"Introducción a los métodos cualitativos de investigación", Editorial Paidós, 1992, 1ª reimpresión. |
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Ulibarri, Eduardo. |
"Idea y vida del reportaje", editorial trillas, Universidad Internacional de Florida, 1994. |
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Vivaldi, Martín G. |
"Géneros Periodísticos", editorial Parainfo. |
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Documentos |
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Villagrán, Carlos y Cecilia Brevis. | Paradigmas y métodos en la investigación en ciencias sociales, II apunte curso de Metodología de la Investigación (1997), Universidad Nacional Andrés Bello. | |
Villagrán, Carlos | Lo cuantitativo y lo cualitativo en cuestiones de método I. Curso de Metodología de la Investigación (1997) | |
Villagrán, Carlos | Lo cuantitativo y lo cualitativo en cuestiones de método II (Comparación entre los paradigmas). Curso de Metodología de la Investigación (1997) | |
Villagrán, Carlos | Lo cuantitativo y lo cualitativo en cuestiones de método III (Formulación de objetivos) Curso de Metodología de la Investigación (1997) | |
Cybergráficas |
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Apolonia, Bibiana | "Los lenguajes de Internet". [enredando.com/cas/cgi-bin/enredantes/plantilla.pl?ident=76]. Publicado el 23/11/99. | |
Casal, Fran | "Periodismo marca acme en la era del gigapop". [enredando.com/cas/cgi-bin/enredados/plantilla.pl?ident=105]. Publicado el 19/10/99. | |
Fernández Hermana, Luis Ángel |
"En busca del periodista digital". [enredando.com/cas/cgi-bin/editorial/plantilla.pl?ident=196]. Publicado el 01/10/96. "De la dictadura de los técnicos...". [enredando.com/cas/editorial/enredando40.html]. Publicado el 08/10/96. "... a la perplejidad de las masas". [enredando.com/cas/editorial/enredando41.html]. Publicado el 15/10/96. "El nacimiento del 'poder suave'". [enredando.com/cas/editorial/enredando42.html]. Publicado el 22/10/96. "El cartero llama mil veces". [enredando.com/cas/editorial/enredando43.html]. Publicado el 29/10/96. "El corresponsal del conocimiento". [enredando.com/cas/cgi-bin/editorial/plantilla.pl?ident=204]. Publicado el 19/11/96. "La cultura de la red en las redacciones". [enredando.com/cas/cgi-bin/editorial/plantilla.pl?ident=247]. Publicado el 07/10/97. "El 4º poder está en obras". [enredando.com/cas/cgi-bin/editorial/plantilla.pl?ident=261]. Publicado el 30/12/97. "Opinión@Pública.Net". [enredando.com/cas/cgi-bin/editorial/plantilla.pl?ident=271] Publicado el 17/02/98. "Periodismo en tiempo real". [enredando.com/cas/cgi-bin/editorial/plantilla.pl?ident=294]. Publicado el 21/07/98. "Estrategias de papel". [enredando.com/cas/cgi-bin/editorial/plantilla.pl?ident=300]. Publicado el 29/09/98. "Papá ¿de dónde vienen las noticias?". [enredando.com/cas/cgi-bin/editorial/plantilla.pl?ident=371]. Publicado el 12/10/99. "La batidora digital". [enredando.com/cas/cgi-bin/editorial/plantilla.pl?ident=372]. Publicado el 19/10/99. |
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Gabriel, Leonardo | "La fragilidad de la información". [www.geocities.com/CollegePark/Theater/4569/fragilidad.htm" | |
Peiró, Karma | "Las preguntas del periodismo en la sociedad de la información". [enredando.com/cas/cgi-bin/enredados/plantilla.pl?ident=88]. Publicado el 01/06/99. | |
Ramírez, Noemí | "Una nueva especie de periodistas". [enredando.com/cas/cgi-bin/enredantes/plantilla.pl?ident=30]. Copyright 1997. | |
Serra Artur | "La comunicación digital como nuevo campo de investigación". [www.gpd.org/maig98/es/comunicaciocon.html] | |
Villate, Javier | "Periodismo de 'fuente abierta'".[enredando.com/cas/cgi-bin/enredantes/plantilla.pl?ident=77]. Publicado el 30/11/99 | |
Hernández Montoya, Roberto | "Breve teoría de Internet". [www.analitica.com/bitblioteca/roberto/teoria.asp]. Versión 16,311. Publicada el 14/04/2000. Versión 1,0 fue publicada el 5/05/1997. | |
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Gil, Quim | Textos de apoyo del curso "Sociedad de la Información", de la Universitat Oberta de Catalunya. (enviados por e-mail) | |
Lista de discusión [en.medi@I+D+D] Suscripciones en: www.enredando.com |
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Lista de discusión [APD] (Asociación de Periodistas Digitales de Chile) Suscripciones en: periodistas.cl |
Lo primero y más completo es este sitio lleno de recursos para la gente interesada en el periodismo e internet. Y lo más importante: en español:
http://www.pressnetweb.com/ciberperiodismo
Claudio Navarro es periodista titulado el año 2000 con la presente tesis. Trabajó en múltiples medios digitales, tanto en la generación de contenidos como en la parte técnica. Actualmente puedes encontrarlo en claudionavarro.net
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