Qué puedo decir. Pegado al televisor el sábado y el domingo, sufriendo por cada punto, con los nervios de punta como todos los chilenos.
Massú y González hicieron lo que nadie creía posible. A mi no me interesa el deporte, pero esta hazaña me hace picar la punta de la nariz, humedecer los ojos y soltar los lagrimones. ¡Dos medallas de oro! Y deberían haber sido dos de oro y una de plata, porque el Fernando González se la merecía más que ese gringo Fish.
Lo que más me llama la atención es cómo estos dos chicos nos dieron una lección: que hay que dejar a un lado esa mentalidad chata que tenemos, en que «no importa que pierda, total ya tiene la plata». Esto es tener huevos, garra, jugárselas el todo por el todo. Esto fue una clase magistral para todos nosotros.
Cada vez que lo recuerdo me viene el picor de nuevo en la punta de la nariz, pero que diablos. Si fue tan lindo el ver ese podio con dos chilenos, que se izaran dos banderas chilenas, y más tarde la emoción en Chile, la gente saltando, gritando, riendo, llorando, festejando. Ese es el país que quiero, uno que esté contento, que sea feliz. Ver esas imágenes me emociona tanto como recordar el partido.
Cabros, se pasaron. Ustedes son grandes. En circunstancias que el chino Rios hubiera dejado los partidos por la presión, ustedes sacaron fuerza de flaqueza y dieron vuelta los resultados. La cagaron. Gracias, gracias, gracias.
Calayo
Hola, les felicito por este super sitio de chilenidad pura, lo voy a comentar con mis amigos y seguro se unirán al resto de seguros visitantes que tienen. Me llamó mucho la atención de que existiera música chilena para bajar, sin embargo no lo he podido hacer, creo que tienen un problema con el servidor, ojalá lo puedan resolver pronto.
Un cordial saludo desde Talca y felicitaciones a ustedes por su página y los campeones mundiales Massú y González y de paso un saludo afectuoso a Fernando Solabarrieta por su gran aporte a la emoción del partido.
Nefele
absolutamente!!! graandes. Mas alla si a uno le guste o no el deporte, esto fue una hazaña inmensa, mas que por el premio (aunque si eran los merecedores de ese premio), la hazaña fue todo su acto de valor, aquello de seguir luichando hasta el final sin importar las condiciones en que estas. INcreible, un aplausos y mil cada dia.