Recientemente me compartieron dos gráficos con la intención de demostrar que «la izquierda empobrece a los países». El primero clasifica países en categorías como «Izquierda democrática», «Comunismo autoritario» y «Democracia liberal», comparándolos en PIB per cápita, libertad económica, desarrollo humano (IDH) y desigualdad (Gini inverso). El segundo presenta radar charts individuales para países como Suiza, Chile, Uruguay, Noruega, EE. UU., China, Rusia, Venezuela, México, Colombia, Corea del Sur y Alemania, usando cinco indicadores: PIB per cápita, IDH, libertad económica, estado de derecho y seguridad (inverso de homicidios). Sin embargo, tras un análisis detallado, concluyo que estos gráficos no solo no apoyan la premisa, sino que tienen serios problemas metodológicos y omiten excepciones clave que contradicen la narrativa. Aquí te explico por qué.
Primero lo primero: cómo comenzó todo.
Todo partió por un video que compartí en mis redes sociales:
Y rápidamente me respondieron con esta joyita:
«Y fue la que le dio libertad a Cuba, Venezuela y Corea del Norte»
Luego de pedirle que no repitiera la propaganda, me respondió con lo siguiente:
No es propaganda… es una realidad y esta en los datos… todos tenemos la libertad de pensar como queramos pero no disfracemos la realidad… nonse trata de superioridad moral amigo… se trata de que no tienes la razón, no eres dueño de la vvd … yo tampoco, pero los datos te dicen la realidad… los países con políticas de izquierda son más pobres y tienen igualdad en la pobreza… es decir todos tienen menor poder adquisitivo… y en cuanto al índice de desarrollo humano bueno… mira el gráfico mejor y yo lo pensaría antes de publicar publicidad simple con monitos y testimonios qué primero… refuerzan la postverdad y segundo es un insulto a nuestra inteligencia…
Acto seguido, me presentó 2 gráficos. Luego que hice críticas al primero, envió el segundo. Los gráficos:
Gráfico 1:
Gráfico 2:
Problemas metodológicos graves
Ambos gráficos adolecen de fallas que los hacen poco confiables para sustentar la premisa:
Datos subestimados y falta de transparencia:
En el primer gráfico, los valores de China están consistentemente subestimados. Por ejemplo, su IDH real es 0.788 (PNUD, 2023), pero el gráfico lo coloca en 0.6. Su libertad económica debería ser 0.58, no 0.2. Esto sugiere manipulación o errores en la normalización.
El segundo gráfico también subestima datos. El IDH de China debería ser 0.82 (normalizado), no 0.6, y su seguridad (basada en una tasa de homicidios baja, 0.5 por 100,000) debería ser más alta. Además, no se explican las fuentes ni el método de normalización, lo que reduce la credibilidad.
Selección sesgada de países:
El primer gráficoomite países clave que contradicen la premisa, como los países nórdicos (Suecia, Noruega, Dinamarca), que tienen gobiernos de centro-izquierda, PIB per cápita altos ($60,000-$80,000 USD), y alta igualdad. Su ausencia sesga la narrativa hacia una visión negativa de la izquierda.
Ambos gráficos tienen una representación limitada, ignorando regiones como África, el Medio Oriente, o el sudeste asiático (excepto Vietnam), lo que limita la generalización.
Falta de causalidad y contexto:
Ningún gráfico muestra si la izquierda causó los resultados económicos. Países como México y Colombia tienen problemas estructurales históricos (desigualdad, corrupción) que preceden a sus gobiernos de izquierda. Venezuela, un caso extremo, se empobreció por mala gestión, corrupción y sanciones, no solo por ser de izquierda.
No se analizan tendencias temporales. Por ejemplo, China, bajo un gobierno comunista, ha reducido la pobreza extrema masivamente, pasando de un PIB per cápita de $300 USD en 1980 a $23,000 USD en 2023.
Excepciones clave que contradicen la premisa
Los gráficos omiten o subrepresentan casos que desafían la idea de que «la izquierda empobrece»:
Noruega (presente solo en el segundo gráfico):
Noruega tiene un PIB per cápita muy alto (0.9, $80,000 USD), un IDH de 0.961 (uno de los más altos del mundo), y alta igualdad. Ha sido gobernada por partidos de centro-izquierda durante décadas, con políticas de redistribución y un Estado de bienestar robusto. Esto contradice directamente la premisa, mostrando que la izquierda puede coexistir con prosperidad económica y social.
El primer gráfico omite a Noruega y otros países nórdicos (Suecia, Dinamarca), lo que sesga la narrativa al no incluir ejemplos de izquierda exitosa.
Rusia (presente solo en el segundo gráfico):
Rusia tiene un PIB per cápita bajo (0.2, $27,000 USD), similar al de China, pero no es un gobierno de izquierda, sino un régimen autoritario de derecha bajo Putin. Su bajo desempeño económico se debe a corrupción, sanciones y falta de estado de derecho, no a políticas de izquierda. Esto demuestra que el autoritarismo y las instituciones débiles, no la izquierda, son factores clave para el empobrecimiento.
El primer gráfico no incluye a Rusia, lo que limita la capacidad de comparar países no de izquierda con bajo desempeño.
Chile y Uruguay:
Ambos países, con gobiernos de izquierda moderada, tienen PIB per cápita relativamente altos para América Latina ($30,000 y $36,000 USD) y buen desempeño en IDH y estado de derecho. Esto contradice la idea de que la izquierda empobrece, mostrando que políticas de izquierda bien implementadas pueden coexistir con desarrollo.
China:
Aunque su PIB per cápita ($23,000 USD) es más bajo que el de países desarrollados, China ha experimentado un crecimiento económico masivo bajo un gobierno comunista, reduciendo la pobreza extrema de manera histórica. Esto desafía la premisa, ya que un gobierno de izquierda extrema ha generado riqueza, no empobrecimiento.
¿Qué dicen los gráficos sobre la premisa?
Primer gráfico:
Superficialmente, parece apoyar la premisa: los países de «Izquierda democrática» (Uruguay, Chile, México, etc.) y «Comunismo autoritario» (Cuba, Vietnam) tienen PIB per cápita más bajos (0.2-0.4) que los de «Democracia liberal» (0.6-1.0). Sin embargo, la omisión de países como Noruega hacen que esta conclusión sea inválida.
Segundo gráfico:
Muestra resultados mixtos. Países de izquierda como Venezuela tienen PIB per cápita muy bajos (0.1), pero otros como Chile, Uruguay y China tienen valores moderados (0.2-0.4), y Noruega tiene un valor muy alto (0.9). Rusia, que no es de izquierda, también tiene un PIB per cápita bajo (0.2), lo que sugiere que el autoritarismo y la falta de estado de derecho son más determinantes que la orientación política.
Los gráficos no apoyan de manera concluyente que «la izquierda empobrece a los países». Tienen problemas metodológicos graves (datos subestimados, falta de transparencia, cherry picking) que los hacen poco confiables. Además, omiten excepciones clave como Noruega, que demuestra que la izquierda puede generar prosperidad, y Rusia, que muestra que el empobrecimiento no es exclusivo de la izquierda. Otros factores, como la calidad de las instituciones, el autoritarismo y el contexto histórico, parecen ser más determinantes para el desarrollo económico que la orientación política.