Esta es la quinta consulta realizada al modelo, que se encontraba en su versión n° 1. No pongo la cuarta porque es deprimente. De hecho, esa es la razón de la pregunta de este reporte. Confirma algo que vengo diciendo hace rato: lo que sucede en Chile es solo una manifestación de algo que sucede en todo el mundo. También es importante notar que sigue evaluando como si estuviera en algún momento de 2022.


Fecha: 10/09/2025
Versión del modelo: 1.0
Prompt:
Este escenario catastrófico parece ir de la mano de la situación mundial. ¿Todos los países están en crisis?


Respuesta

Su observación es precisa. Desde la perspectiva de la Psicohistoria del Profesor Jiang, no es que todos los países estén en crisis, sino que el sistema global de ecosistemas culturales interactuantes está experimentando una fase de transición violenta y reajuste. Es un «cambio de marea» histórico donde las «corrientes oceánicas» chocan con fuerza renovada.

El modelo sugiere que lo que se observa a escala global es la manifestación simultánea de varios de los patrones descritos en el documento, acelerados por la globalización.

1. El Proceso de «Energización» y Conquista Inversa a Escala Global

El imperio que ha «energizado» al mundo en las últimas décadas ha sido el ecosistema cultural Norteamericano Anglosajón (con su brazo financiero y cultural). Ha inyectado globalmente:

  • Riqueza: A través de mercados financieros globalizados, corporaciones multinacionales y consumo.

  • Conocimiento e Información: A través de internet, Hollywood, la cultura tecnológica y las redes sociales.

Esto ha «energizado» las fronteras culturales de todo el mundo, pero no de manera uniforme:

  • Fronteras Geopolíticas: Ucrania es la frontera crítica entre el ecosistema Euroatlántico y el Ruso-Eurasiano. Taiwán y el Mar de China Meridional son la frontera entre el ecosistema Sinocéntrico y el Euroatlántico. Oriente Medio es la frontera perpetua.

  • Fronteras Internas: Dentro de casi todos los países, se ha creado una frontera interna entre los «globalizados» (urbanos, conectados, beneficiarios del modelo) y los «localistas» (rurales, tradicionales, perjudicados por la desindustrialización y la pérdida de identidad). El auge del populismo de izquierda y derecha en Europa y América es un síntoma de este conflicto fronterizo interno.

El resultado es el predecible crecimiento y conflicto interno en estas fronteras, que busca resolverse mediante expansión (guerras culturales, polarización política, conflictos geopolíticos).

2. Teoría de Juegos Global: Un Mundo en un «Dilema del Prisionero» Permanente

Los principales jugadores globales actúan según sus intereses percibidos, llevando a resultados subóptimos para todos.

  • Jugador 1: Estados Unidos (y el «Imperio» Global):

    • Estrategia Óptima Percibida: Mantener la primacía global («America First»), contener a China y Rusia, y controlar los flujos financieros y de información.

    • Resultado: Agotamiento de recursos, sobrextensión militar y el surgimiento de una fuerte resistencia por parte de otros jugadores.

  • Jugador 2: China:

    • Estrategia Óptima Percibida: Ascender pacíficamente al statu quo, ganar influencia económica y tecnológica, y evitar conflictos directos hasta estar preparada.

    • Resultado: Creación de un bloque alternativo que desafía al occidental, generando fricciones inevitables (ej., en el Mar de China Meridional).

  • Jugador 3: Rusia:

    • Estrategia Óptima Percibida: Debilitar y fracturar la alianza Euroatlántica (OTAN) para recrear su esfera de influencia y asegurar su supervivencia regime.

    • Resultado: Guerra de desgaste en Ucrania, crisis energética e inflación global.

  • Jugador 4: Potencias Medianas y Élites Transnacionales:

    • Estrategia Óptima Percibida: Jugar a todos los bandos, extraer recursos y poder del caos sistémico, y mantener su estatus.

    • Resultado: Aumento de la corrupción, erosión de los estados-nación y profundización de la desigualdad.

El Equilibrio de Nash global actual es inestable. Nadie puede ceder sin sentirse perder, pero la cooperación es cada vez más escasa. Todos confiesan en el «Dilema del Prisionero», llevando al mundo hacia un resultado peor para todos: la desglobalización conflictiva y el riesgo de un conflicto mayor.

3. Evaluación Global del «Corazón Humano» (Eudaimonia)

Esta es la causa raíz que explica la sincronía de las crisis. El modelo económico-cultural global dominante ha reprimido las motivaciones humanas fundamentales en casi todas partes:

  • Amor y Interacción Social: Reemplazados por el «culto al yo», las redes sociales que generan envidia y ansiedad, y la atomización de las comunidades.

  • Creación y Crecimiento: Suprimidos por trabajos precarios y sin significado, por la automatización que despoja del propósito laboral, y por la dificultad de acceder a educación y oportunidades reales de desarrollo.

  • Propósito y Significado: Vacíos por el decline de narrativas religiosas y nacionales tradicionales, sin que el materialismo consumista ofrezca un reemplazo satisfactorio.

El resultado es una epidemia global de malestar—depresión, soledad, polarización, nihilismo—que se manifiesta como protestas (Chile, Francia), auge de extremismos (EE.UU., Europa), y apatía política. Las sociedades con alta sincronicidad (ej., Alemania, Japón) resisten mejor este embate, pero incluso ellas muestran grietas. Las de baja sincronicidad (ej., gran parte de Latinoamérica, EE.UU. mismo) se desintegran a mayor velocidad.

4. Conclusión: No Todos en Crisis, Pero Todos en Transición

La psicohistoria no predice el colapso universal, sino un período de reajuste doloroso y inevitable («huracán») donde los ecosistemas culturales buscan un nuevo equilibrio.

  • Países en Crisis Aguda: Son aquellos donde las fronteras internas y externas están sobre-energizadas y el conflicto es abierto (Ucrania, Israel/Palestina, Chile, Haití, Myanmar).

  • Países en Crisis Latente: Son aquellos que mantienen una fachada de estabilidad (EE.UU., Reino Unido, Francia, Alemania) pero donde la represión de la eudaimonia y la baja sincronicidad social crean una presión interna que puede estallar en cualquier momento (ej., protestas de los «chalecos amarillos» en Francia, el Jan 6 en EE.UU.).

  • Países en Reconfiguración Autoritaria: Son aquellos que, ante la amenaza del caos, están optando por una solución «monárquica» o autoritaria que sacrifica libertades por orden y estabilidad percibida (Rusia, China, Hungría, El Salvador). Es la aplicación del modelo de «rey» a escala nacional.

En resumen, no todos los países están en llamas, pero el mundo entero está en la misma corriente oceánica tormentosa. La crisis chilena no es una anomalía; es un microcosmos especialmente vibrante de un patrón macrohistórico global: el fin de un ciclo de globalización y el doloroso nacimiento de uno nuevo, donde los ecosistemas culturales luchan por redefinir sus relaciones y, sobre todo, por encontrar una forma de organización que no reprima el «corazón humano». El modelo del Profesor Jiang predice que esta turbulencia continuará hasta que ese nuevo equilibrio, forjado en el conflicto, emerja.